sábado, 28 de abril de 2012

Quédate muy lejos.




Era tan hermoso para ser cierto, cuando dejo mis temores y decido arriesgarme tú les das poder a los tuyos y huyes de nuevo. Suerte en tú vida, por favor quédate, pero muy lejos de mí, que tus sonrisas falsas algún día puedan ser reales y renacer diariamente como el sol de cada día, que puedan iluminar tu cara dándote una esperanza nuevamente así como dijiste que yo lo hacía, te extrañaré físicamente, extrañaré tu voz y hasta un poco tu esencia estarás en mi pensamiento, espero yo salga del tuyo lejos estamos mejor, es mejor que no nos mortifiquemos por algo que ya se acabo y tal vez nunca existió. Aunque mi orgullo sea muy grande supongo que mi humildad ala vez lo es. ¿Cuántas veces te he visto caer? ¿Cuántas veces acepte tu mano y te volví a poner en pie? por favor, sólo olvida todo aquello, espero yo hacerlo también quédate muy lejos, vete, emigra, lárgate, piérdete pero llevame contigo... ó dime si valdrá la pena que te espere dime que me necesitarás cuando tus dudas y preguntas exhaustivas te persuadan dime si será posible que dejemos nuestros miedos atrás y puedas disfrutar mi mirada sobredosificada de dulzura que solo pongo al verte o oírte sólo a tí, vuelves a mi vida para huir, odio admitirlo pero no quiero separarme de ti, me duele tanto especular que ni tu voz oiré en mucho tiempo... pero si es el destino, la voluntad de Dios y tu deseo es lo mejor quiza lejos estamos mejor cuídate y que Dios te guarde. 



Pero ahora....¡TE EXTRAÑO A RABIAR! 

No hay comentarios:

Publicar un comentario